domingo, 27 de abril de 2014

Qué confuso es todo.

Siempre defiendo el "luchar las mañanas", el "tú eres quien cambia todo", o "prometo que eres libre, decide".
Basándome en eso, consigo lo que quiero... Pero últimamente, no me creo nada de esto.
No me veo con fuerzas ni para luchar, ni para cambiar, ni para decidir. Cada vez el mundo es más difícil de llevar, cada vez todo esto se me hace más complicado... Me planteo dejarlo todo y seguir el curso de la vida, pero... ¿realmente eso sirve de algo? Aunque... ¿sirve de algo lo que suelo defender?
Qué confuso es todo.
Es algo así, como un abandono por parte de todos, dónde he terminado sucumbiendo.

Tú.

Sentir que nada tiene sentido. Que nada de lo que haces tiene un fin. Ni siquiera un principio. Que pasan los días.Y pasan. Y tú sigues ahí. Sin hacer nada. Nada llena ese vacío que te atormenta. Todo parece estar perdido.
 No sabes como saltar esa rutina. Más bien, no puedes. Llevas años encerrada en un día que no acaba ni empieza. Siempre igual. Sentir que no avanzas, que la vida pasa y tú te quedas.
Ya no puedes más, sólo esperas una gota de esperanza que lo cambie todo... Y entonces... lo descubres... Tú.

Bienvenido a mi pequeño mundo.

Creé este blog para expresar lo que siento, para sentir que cada palabra que escribo, cada emoción que sienta, ya sea buena o mala, se va.
Creé este blog porque es un modo de decirle al mundo que estoy aquí, que no he venido a dejar huella, pero tampoco a pasar desapercibida. 
Creé este blog, simplemente porque necesito sacar todos estos sentimientos que tengo guardados, que no tienen por dónde salir.
Creé este blog  porque es una forma de compartir. 
Creé este blog  para que alguien me escuche, para que recuerden que todos tenemos cosas que decir.
Creé este blog  para poder decir lo que pienso sin ninguna condición.
Creé este blog para sentir que tengo un rincón en este pequeño, gran mundo. 
Creé este blog, porque puedo.
Y sobre todo, creé este blog, porque lo necesitaba.
Para salir de esta rutina que nos ata, para darle un punto de gracia a esta vida, para tener un motivo más para levantarme, y simplemente, porque lo necesitaba...
Bienvenido a mi pequeño mundo.